DISCURSO DEL
MAESTRO SAINT GERMAIN
Los Hijos de la Libertad
son llamados todos aquellos
Conquistadores
de la Luz que conociendo o intuyendo
el Plan Divino, se adhieren a él tenazmente,
mientras se esfuerzan en
el afán diario por mantener su
propia conquista y control de su
cuaternario de manifestación.
Hemos llegado a los tiempos en que
ser ¡Libres! es desprenderse de
todos los soportes, cadenas
y lastres que aprisionan la pura
expresión de la Naturaleza Divina,
tomando en cuenta que
el Reino Espiritual
recupera cada vez más
Su primacía para la
evolución del mundo.
Claramente es señalado
“El Aliento del Espíritu Santo
expandiendo la Esencia
Crística en el Corazón Humano”.
Esto significa que la humanidad
absorbe las Partículas Divinas
de Energías Vibrantes en esta Era,
que los Ángeles califican en
los electrones del éter atmosférico.
Si dijera que inhalan la propia Esencia
del Santo Espíritu de Dios,
completaría vuestra comprensión.
Al momento de liberar de los mundos sensitivos los grilletes del desamor,
separaciones, competencias y errores,
de inmediato la Energía Purísima de la Presencia Dios en cada uno se
derramaría como un torrente portentoso,
suministrando todo lo que significa
“La Gracia plena de Dios puesta en acción”.
Cada uno es impelido por
el Espíritu de la Vida
para recobrar su propia Deidad.
Las señales se hacen
Signos de Fuego.
Aquellos que son honestos distinguen
sin equívoco alguno
dónde está la Luz.
La Américas han abierto
sus sagrados templos y son las tierras que cobijarán, nutrirán y
expandirán la Sagrada Luz del Cristo Viviente, con la Bendición de los
poderosos Dioses Merú, cuya Actividad ya no cesará hasta la Iluminación de
toda la humanidad.
¡Grandes desafíos tienen por delante, los que avanzan sin temer y son
plenamente libres en la Luz de Dios!
¡Yo levanto la Cruz de la Victoria
sobre el cuaternario
para el triunfo perfecto
de la Presencia de Dios en cada uno!
Mis bendiciones,
Saint Germain
* * *
DECRETO
¡YO SOYel balance perfecto
de la Luz de Dios en mi ser,
Yo Soy el que siempre Yo Soy!
* * *
(Mirtha Verde-Ramo 1º de
Enero de 2002)
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DISCOURSE OF THE
MASTER SAINT GERMAIN
The Children of Freedom are
called those Conquerors of Light who knowing or intuiting the Divine
Plan, adhere to It tenaciously, while making the effort in
their everyday lives to maintain their own conquest and control of
their four earth bodies.
The time has come to be Free!
To liberate oneself from all the ties,
chains and burdens that trap the Pure Expression of the Divine Nature,
knowing that
The Spiritual Kingdom is again
taking Its
dominion,
more and more for
the evolution of the world.
It can clearly be seen that
'The Breath of the Holy Spirit is expanding the Christ Essence within
the Human Heart.'
This means that mankind is absorbing the Divine Particles of the
Vibrant Energies in this Age, which the Angels are qualifying
in the electrons of the atmospheric ether.
If I said that you
inhale the Essence Itself of the Holy Spirit of God,
I would complete your understanding.
At the moment of being released from the shackles of lack of love,
separations, competitions and errors of the physical worlds, immediately
the Pure Energy of the God Presence of each one would flow out as a
prodigious torrent, providing
all that
"The full Grace of God-in-Action” means.
Each one is impelled by the Spirit
of Life to access again the Deity within him or herself.
The signs are Signs of Fire.
Those Souls who are honest,
distinguish without any misunderstanding
where the Light is.
The Americas have opened
their sacred temples and are the lands that will shelter, nurture and
expand the Sacred Light of the Living Christ, with the Blessing of the
powerful God and Goddess Meru, whose Activity will not cease until the
Illumination of all humanity and until all are fully free in the Light of God.
Great challenges lie
ahead, for those that advance without fearing and are totally free in
the Light of God!
I lift Victory's Cross
over the four earth bodies for the perfect Triumph of the Presence of God
in everyone!
My Blessings,
Saint Germain
* * *
DECREE
I AM the perfect balance
of the Light of God in my Being,
I AM always that I AM!
* * *
(Mirtha Verde-Ramo, January 1st, 2002)
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